Capítulo 1: Descubrimiento de la administración
Alejandro siempre había pensado: "¿Cómo es que una empresa puede crecer y tener éxito y la otra parece estar naufragando de manera inevitable?" Era un misterio para ella y, por esa razón, decidió explorar la administración. Aunque había nubes en su camino, para ser justa, todo parecía confuso, pero la pasión por aprender cómo funcionaba la grandeza era más fuerte que nunca. Un día, conoció al profesor. Este presentaba un traje gris y gafas que emanaban sabiduría. "Alejandro, ¿quieres descubrir los secretos de las empresas exitosas? Bueno, entonces definitivamente querrás descubrir la administración ", dijo el profesor con una sonrisa. "¡Así que lo hago!" exclamo Alejandro, emocionada para continuar. El profesor le explicó "Directamente a punto. La administración es guiar un barco. Soy el capitán y tienes un destino, pero no puedes lograrlo solo. Pero puedo darte una brújula. Y me refiero a los conceptos clave: planificación, organización, liderazgo y control. Si sigues un curso concreto basado en estos principios, incluso en las olas más turbulentas, te llevaré sano y salvo a casa". Se sorprendió al darse cuenta de que la administración no es solo para empresas, sino también para equipos de fútbol y ONGs. "¡Esto está en todos lados!" pensó.
Capítulo 2: La magia de la Empresa
Un día, el profesor le pidió a Anna que fuera a un lugar especial: La Empresa Viva. Una empresa imaginativa, un ecosistema dinámico que representa una organización dinámica y altamente funcional. En este entorno, Anna pudo ver cómo interactuaban las diferentes partes de la empresa y cómo se hacía todo en su conjunto.
"Sabes, Alejandro, en el centro de toda esta magia está la propia empresa. Pero ¿qué es exactamente una empresa?
"¡Así es! Pero una empresa es una organización que tiene un propósito: satisfacer las necesidades de las personas, crear empleos y, por supuesto, una meta que alcanzar. Comprender esto es importante porque, como gerente, su trabajo es hacer crecer la empresa y sostenerla. Alejandro observó cómo los empleados de La Empresa Viva trabajaban juntos, cada uno cumpliendo su rol, dándose cuenta que la clave del éxito de la empresa era alinearlos a todos hacia un mismo objetivo..
